Monasterio de Studenica

Religión Nemanja

La historia de la cristianización de Serbia es larga y compleja. Hasta el 602, esta región heredera de tiempos romanos era cristiana, pero varias oleadas de tribus eslavas y ávaras diezmaron la población y la ocuparon. Cristianizar a los eslavos fue una tarea de siglos que empezó por convencer a las clases dirigentes para ir paulatinamente calando al pueblo. Las influencias eran búlgaras y griegas cuando al ascenso político de Serbia fue acompañado por el religioso. Rastko Nemanjić, renombrado como Sava e hijo del fundador de Serbia Stefan Nemanja, se reencontró con su padre cuando abdicó y le acompañó en su monasterio del Monte Atos. Juntos iniciaron el proceso que en 1219 independizó la Iglesia Ortodoxa Serbia, autocefalía que abarca territorios de Serbia, Montenegro y Bosnia-Herzegovina. Unos años antes enterró a su padre en el monasterio de Studenica, que Stefan había fundado en 1190. Con el tiempo se convirtió en el mayor y más rico monasterio serbio, gracias sobre todo a sus frescos de los siglos XIII y XIV.

Iglesias de la Virgen María y del Rey en el monasterio Studenica

Estamos en los Alpes dináricos, en las montañas Golija, en cuyo extremo sur se encuentra Stari Ras, capital histórica serbia. Varios ríos parten de las montañas en dirección al Danubio. Gracias al profundo cañón que forma, uno de los más bellos es el Studenica. Desde su privilegiado mirador, el monasterio homónimo mira al río. Fue el lugar elegido para el más relevante de los templos cristianos serbios, cuya construcción se prolongó siglos. La primera fase constructiva estuvo dirigida por el propio Stefan, al que sustituyó su hijo Sava cuando se retiró sus últimos años al monasterio Hilandar en Monte Atos. Sava no solo fue responsable de fundar la Iglesia Ortodoxa Serbia, sino que logró la paz entre sus hermanos celebrada con el traslado del cuerpo del padre a Studenica. Como mausoleo del fundador del estado y bajo la dirección de Sava, Studenica no necesitó más para convertirse en referencia de su Iglesia. Sava, además, escribió aquí el typicón de Sava donde describió la vida de su padre, santificado como San Simeón poco después. Se considera la primera obra escrita en serbio.

A comienzos del siglo XIII se había finalizado en Studenica la iglesia de la Virgen María, principal del recinto monástico. Fue la primera de un enorme complejo levantado hasta el final de la dinastía Nemanjić en 1371. El recinto fue completamente amurallado, hecho que aprovecharon los monjes para instalar sus aposentos alrededor de la puerta oeste, rodeando nuevos templos como San Nicolás, del siglo XIII, o San Joaquín y Ana de comienzos del XIV, también conocida como iglesia del Rey. Ambas están al sur de la iglesia principal, donde se acumulan estas pequeñas iglesias, quedando el campanario principal al norte, en el perímetro amurallado. La devoción que atrajo Studenica traspasó este y extramuros se levantaron capillas, oratorios y ermitas. Tras la caída serbia a manos otomanas, Studenica pasó su peor época. En el siglo XVI se acometieron las primeras restauraciones de sus valiosos frescos. En el siguiente fue un terremoto el que causó desperfectos por el incendio que provocó y afectó a varios frescos.

Interior de la iglesia de la Virgen María en Studenica con el fresco de la Crucifixión

Los frescos de Studenica son su mayor tesoro, aunque la arquitectura no se queda atrás. Especialmente relevantes son la iglesia de la Virgen María y la del Rey, ambas con partes en mármol blanco. La primera tiene una bóveda central al que se le fueron añadiendo elementos como el exonártex del oeste. Su estilo de la escuela de Raška mezcla armoniosamente el bizantino y un románico abrazado para desmarcarse de los antiguos gobernantes. En cuanto a la del Rey, es una minúscula iglesia de cúpula octogonal, pero sus frescos marcan a comienzos del siglo XIV el cénit artístico del arte posbizantino serbio. Anteriores son los distintos frescos elaborados en el siglo XIII en la Virgen María, cuyas cuatro portadas están adornadas, especialmente la oeste gracias el exonártex. En el interior destaca especialmente el fresco de la Crucifixión de 1209. Además de los motivos religiosos, en Studenica es habitual ver a los miembros de la dinastía Nemanjić representados como donantes.

Las montañas de Golija se encuentran entre Kraljevo y Novi Pazar. Entre ambas, separadas hora y media, veremos el desvío al monasterio de Studenica a la altura de Usce. Podemos verlo haciendo una parada que nos llevará unas dos horas, o podemos alojarnos en el monasterio compartiendo vida con los monjes. El monasterio es gratuito, pero podemos hacer uso de un monje como guía y también ver el valioso tesoro del monasterio. El entorno natural de Studenica merece ser disfrutado con calma. En invierno hay estaciones de esquí disponibles pese a que las montañas no alcanzan los 2.000 metros, mientras que el resto del año el senderismo y ciclismo son habituales, aunque de momento entre serbios. Hay otros monasterios en las montañas como Đurđevi stupovi y Sopocani.

Fotos: ljubar / Vera Bukvic