Navigation Menu
Sitios del sistema tusi

Sitios del sistema tusi

Hunan, Hubei y Guizhou (China)

Ordenando la complejidad


Se tiende a pensar que China es un país étnicamente homogéneo, pero no es así. Aunque los han sean muy mayoritarios con más del 90% de población, hay otras 55 etnias oficialmente reconocidas. Como hablamos de China, los números no son pequeños: entre todas suman más de cien millones de personas. El eje entre Pekín y Cantón, con los deltas de los grandes ríos, es el núcleo del país. Desde aquí, los chinos se expandieron a base de conquistas. Gestionar un nuevo territorio ocupado por otra etnia de lengua y cultura diferentes plantea dos posibilidades: integrar desde el respeto a esa cultura o forzar un proceso de aculturación. En el siglo XIII, la dinastía mongola Yuan reinaba en China cuando cambió el habitual rodillo cultural han. Quizá por ser ellos mismos una minoría, implantaron el sistema tusi. La idea principal era asociarse con un jefe local, respetado por los recién conquistados, para gestionar con tacto el nuevo territorio. Estos jefes locales, ayudados por el imperio, fundaron o utilizaron ciudades asentadas en las zonas montañosas al este del Tíbet. Testigo de entonces son los sitios de Laosicheng, Tangya y el fuerte de Hailongtun.

Vista del meandro del río Lingxi donde se asienta Laosicheng

Corría el año 1253 cuando los Yuan, liderados por Kublai Kan, conquistaron el reino de Dali, en la zona de la actual Yunnan. Cuentan las crónicas que un traidor mostró un paso a través de las montañas a los invasores que fue de hecho el último rey Dali: Duan Xingzhi. Temiendo una derrota fatal, Duan rindió su reino a cambio de que su dinastía retuviera el poder regional dentro del imperio chino. Así arrancó el sistema tusi, basado en la administración central con respeto a las minorías. Al menos en teoría, porque el proceso de aculturación, pese a ser lento, existió. Más aún desde el siglo XIV, cuando el sistema dio un giro con el ascenso de la dinastía Ming. Las áreas gobernadas por los tusi se resistieron a este cambio y amagaron con la independencia. Esto no sirvió más que para que los Ming introdujeran cambios en el sistema orientados a controlar más de cerca estos territorios. Los nuevos tusi eran nombrados directamente por el gobierno y estaban obligados a aportar tropas, aplacar rebeldes y pagar tributos. El puesto era hereditario, pero siempre bajo supervisión Ming.

El concepto tusi, de hecho, nació con los propios Ming. Con los Qing, el sistema decayó y en el siglo XVIII quedó muy tocado, aunque desapareció oficialmente en 1953. Hay identificados unos cien sitios con restos de este sistema en varios provincias chinas del suroeste montañoso. Son zonas donde las minorías tujia, gelao o miao suponen la mitad de la población. Aquí, el sistema tusi mantuvo un esquema doble de valores y centros de administración chinos junto a la dispersión poblacional típica de estas etnias. En cada sitio tusi hay motivos que demuestran la influencia de cada minoría. Son pequeños detalles como frisos o adoquinados presentes en las calles de la ciudad terraceada de Laosicheng. Este lugar era centro de poder antes del sistema tusi. La familia Peng estuvo al frente del siglo XIII al XVIII, cuando el lugar quedó abandonado. Esta poderosa familia remodeló esta ciudad a orillas del río Lingxi. Hoy sobreviven varios halls, un arco de entrada y dos necrópolis: la tusi y la local tujia.

Paso Chaotian en el fuerte de Hailongtun

Laosicheng fue una de las ciudades tusi más grandes, pero más impresionante resulta el fuerte Hailongtun por su localización sobre la montaña Longyan. Levantado también en el XIII, este castillo medieval fue residencia de la familia Yang, que controló un territorio tan extenso como el de los Peng, pero con las etnias miao y gelao alrededor. En un sitio estratégico, el castillo se adapta al terreno con seis kilómetros de murallas intercaladas con torres vigía, puertas y barbacanas. En 1601, los tusi de Hailongtun se rebelaron, pero cayeron a manos de los Ming, que quemaron el castillo. Así, buena parte de los edificios son posteriores. Por último, Tangya representa un sitio tusi de menor alcance. Gobernado por la familia Qin en una zona tujia, es una muestra a pequeña escala de elementos presentes en Laosicheng y Hailongtun.

Ninguno de los tres sitios tusi es muy turístico, al menos a escala internacional. No obstante, los tres son perfectamente visitables y lo más complicado será encontrar transporte hasta ellos. Para ir a Hailongtun tendremos que ir desde Chongqin hacia el sur, estando muy cerca de Zunyi. Es posible llegar desde aquí en autobús y en el recinto podremos dedicar 3-4 horas incluyendo el ascenso a pie. Laosicheng tiene la suerte de estar a solo dos horas de un punto turístico como el Parque Nacional Zhangjiajie. A pesar de ello, no recibe muchas visitas. El sitio de Tangya, más remoto, está a unas cinco horas de Laosicheng. En los tres sitios podemos complementar la visita conociendo a las etnias locales y haciendo algún itinerario de montaña.

Fotos: Management Office of Laosicheng Tusi Domain / Management Bureau of Hailongtun Tusi Fortress in Zunyi City

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.