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Sitio arqueológico de Atapuerca

Sitio arqueológico de Atapuerca

Castilla y León (España)

Europa antes del Neandertal


La evolución de las distintas especies de homínidos que han poblado la Tierra no ha sido uniforme. Aunque algunos de ellos sí estén emparentados, la presencia de otros introduce a los paleontólogos y arqueólogos en territorios desconocidos. En el norte de la península Ibérica hay una pequeña comarca llamada Bureba. Comunica las cuencas de los ríos Ebro y Duero con un paso que atraviesa una sierra: la sierra de Atapuerca. En esta zona se han localizado los yacimientos paleontológicos seguramente más relevantes de toda la península. Además de homínidos ya encontrados en otras partes, como el Homo Heidelbergensis o Sapiens, Atapuerca multiplicó su importancia gracias al Homo Antecessor. La presencia de este temprano homínido en Europa, sin relación aparente con el posterior Heidelbergensis, y su origen no africano han levantado todo tipo de especulaciones. Por si fuera poco, en los metros de capas de sedimentos de Atapuerca se han encontrado fósiles de animales históricos y útiles líticos desde el pleistoceno hasta la Edad de Bronce. En total, hablamos de más de un millón de años de evolución de fauna, flora y clima.

Cráneo de Miguelón, el Homo Heidelbergensis mejor conservado

Cráneo de Miguelón, el Homo Heidelbergensis mejor conservado

La sierra en sí fue formada hace unos 80 millones de años. Son montes de caliza y arenisca de no mucha altitud. El río Arlanzón y otras fuentes de agua empezaron a horadar la tierra y producir cuevas que luego también se derrumbaban, guardando en su interior sus tesoros. Este paso fue utilizado históricamente por muchas civilizaciones. Los romanos, por ejemplo, construyeron aquí una calzada. Por eso no resultó extraño que a finales del siglo XIX se desplegara un tren para dar servicio a la industria vasca. Ya en esta construcción se vieron las primeras capas, pero habría que esperar hasta 1964 para que los paleontólogos prestaran más atención a Atapuerca. Francisco Jordá Cerdá fue el primer impulsor, pero fue especialmente en los años 70 cuando el trabajo se intensificó de la mano del Grupo Espeleológico Edelweiss. En los años 80, la sima de los huesos empieza a reportar resultados hasta que en 1992 sale a la luz el homínido Heidelbergensis llamado Miguelón, dando proyección internacional a Atapuerca. Las investigaciones continúan y, por ejemplo, se demuestran prácticas de canibalismo entre los homínidos.

Los protagonistas de estas últimas prácticas aparecen en 1997, cuando se descubre el primer Antecessor. Hablamos del antepasado europeo más antiguo que se conoce, datado entre 800.000 y 1.200.000 años atrás, en el denominado pleistoceno inferior. Aún existe debate sobre si es un eslabón perdido o formó una rama evolutiva al margen. Estos homínidos medían entre 1,6 metros y 1,8. Su capacidad craneal era inferior al Heidelbergensis y se acerca en muchos aspectos al Ergaster africano y al propio Sapiens. Su rango de audición, por ejemplo, ya era similar al Sapiens, lo que podría suponer un pensamiento simbólico similar al nuestro. Además, se encontraron herramientas especiales de los Heilderbergensis. Un bifaz, una piedra con doble filo, fue encontrado intacto en un enterramiento. Parece que Excalibur, como se le llamó, formó parte de un enterramiento sacralizado, lo que supone un pensamiento avanzado.

Trabajo estacional en uno de los yacimientos de Atapuerca

Trabajo estacional en uno de los yacimientos de Atapuerca

Atapuerca está compuesta por más de cincuenta yacimientos, pero destacan dos zonas: la trinchera del ferrocarril y la Cueva Mayor. En el primero, la Gran Dolina saltó a la fama gracias a ser el lugar donde se encontró el primer Antecessor. Además de este, se ha encontrado multitud de fauna primitiva en sus 18 metros de sedimentos. La sima de los elefantes, llamada así por encontrar restos de estos animales, llevó más atrás aún la fecha del Antecessor. Además de utensilios para rasgar carne, se ha encontrado una mandíbula datada hace 1,2 millones de años. Podría ser de un nuevo eslabón perdido, pero falta información. En Cueva Mayor es donde se encontraron los Heidelbergensis mejor conservados que se conocen. Son 30 individuos entre los más de 5.000 fósiles. Suponen más del 80% de los fósiles de homínidos del pleistoceno medio del mundo. La zona de El Portalón es más moderna, con restos de cerámica posterior y pinturas rupestres conocidas ya desde comienzos del siglo XX.

Atapuerca está muy cerca de la ciudad de Burgos, ciudad castellana accesible fácilmente incluso por aire en la que es imprescindible su catedral. El moderno Museo de la Evolución Humana está en la propia ciudad y supone un paso obligatorio para entender Atapuerca. Aquí se encuentran hallazgos como Miguelón o Excalibur. Hay visitas guiadas muy didácticas casi de continuo. Si se quiere ir a los yacimientos en sí hay que reservar con antelación y mirar bien los horarios. Hay autobuses lanzadera desde el propio museo o desde los centros de visitantes de Atapuerca e Ibeas de Juarros. No hace falta ir en grupo, pero sí es necesario ir en una visita guiada para las que hay pocos horarios.

Fotos: UtaUtaNapishtimLittle Sadie

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